01-08-2014
Poemas contra la violencia de género
Autor: Carmen Julia Holguin Chaparro
Carmen Julia HolguÃn Chaparro
Con el corazón
Cuando mi voz alcanzó el sonido
y hubo quien escuchó
lo que decÃa,
el hombre que me amaba
me cortó la lengua.
Cuando mis manos grabaron palabras
y hubo quien leyó
lo que escribÃa,
el hombre que me amaba
me partió los brazos.
Cuando aprendà a hablar con la mirada
y hubo quien descifró
el código de mis pupilas
el hombre que me amaba
me sacó los ojos.
Casi sorda de nacimiento
con un hálito mÃnimo
para beber en la huida,
una noche tomé mi corazón
entre las piernas
y abandoné
al hombre que me amaba.
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Un cuento diferente
Ella era un sol
que iluminaba murmullos,
y le gustaba tejer con notas musicales
enormes canastos
que llenaba con piedras de rÃo.
Con su caperuza de sueños,
se lanzaba a la tarde
para jugar a las escondidas
con la sorpresa
y la aventura.
Un dÃa,
apareció la caperuza
a un lado de la tarde.
Los murmullos apagados
eran sollozos
con los que el viento
manoteaba las horas.
Ella
en eclipse total
dormÃa bajo las piedras de rÃo
con las que llenaba
aquellos enormes canastos
que tejÃa con notas musicales.
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Diagnóstico
El expediente anota:
Una, do cenas de magulladuras
al lavar los trastes
y tender la ropa
tres, cua tropellos con el perro
al estar limpiando la casa,
con los consecuentes
cortes en diferentes áreas del cuerpo
cin costillas rotas al pegarse
contra el filo de
la puerta
o al abrir los gabinetes
de la cocina.
Nue venas cortadas
al no fijarse
por dónde camina
y caer por las escaleras
accidentalmente.
¿El diagnostico?
Torpeza.
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Antes del fuego
el dolor
ya era una costumbre
antigua.
Años de sal por miles,
en el centro de una herida
entre las piernas,
jamás cicatrizada.
Siglos pagando el precio
de no haber nacido hombre
a golpes de mirada.
Cercada de fronteras.
Señalada
por Ãndices acusadores.
Tiempo sin tiempo para llorar
por el milagro de existir
para desear
haber sido una semilla vana
y no saber de la luz
ni de la posibilidad
inalcanzable
del placer.
No, el dolor
no ha sido una sorpresa,
estaba ahÃ
antes del fuego.